Este fenómeno astronómico visible en todo el mundo será este año más espectacular gracias a la fase en la que se encuentra la Luna
La lluvia de estrellas —un fenómeno habitual que ocurre cuando la Tierra cruza el rastro de partículas que dejan los cometas— de las Oriónidas llega a su máximo visible la madrugada de este sábado 21 de octubre. Las Oriónidas proceden del Halley, que orbita alrededor del Sol aproximadamente cada 76 años, se llaman así porque parecen proceder de la famosa constelación de Orión y se pueden observar en todo el mundo cada año. «No es la lluvia más fuerte, pero es una de las más hermosas del año», asegura Bill Cooke, jefe de la Oficina sobre Meteoritos de la NASA. Y este año, la Luna hará que se vean mucho mejor.
Sobre cuál es el mejor momento de la noche para verlas, el divulgador científico especializado en astronomía y ciencias del espacio Antonio Pérez Verde explica que habrá un «ligero aumento de actividad momentos antes del amanecer». Este fenómeno astronómico, que también podrá apreciarse la noche del sábado al domingo aunque «en menor cantidad», comenzó el 2 de octubre y acabará el 7 de noviembre. Ese es el tiempo que la Tierra tarda en atravesar la cola o estela del Halley, cuyo último paso observado data de 1986.
Una de las peculiaridades de las Oriónidas es que podrá apreciarse en todas partes del mundo, ya que pasa «muy cerca del Ecuador celeste», según el experto, que explica que la visibilidad del fenómeno revela de dónde parecen proceder los meteoros, lo que técnicamente se denomina radiante. Las Oriónidas radian de la constelación de Orión, pasando muy cerca de la estrella supergigante roja Betelgeuse.
«Dependiendo de dónde esté ese radiante, se podrá ver en un hemisferio u otro; si el radiante está muy al norte del Ecuador celeste, sólo se verá en el hemisferio norte, y si está muy al sur del Ecuador celeste, se verá en el hemisferio sur», detalla.
Además, las Oriónidas de este año podrán apreciarse mejor que otros años por la fase en la que se encuentra la Luna. «Vamos a tener suerte porque hoy, día 19, es Luna nueva, por tanto el 21 va a haber muy poca luna», señala Pérez Verde. El año pasado este fenómeno apenas se pudo observar en el cielo porque hubo Luna Menguante el 16 de octubre.
La tasa de actividad que dejarán las Oriónidas es de 23 meteoros por hora y tendrán una velocidad de 66 kilómetros por segundo, «alta» según el divulgador científico. Las Perseidas de agosto, por ejemplo, tienen una velocidad de 59 kilómetros por segundo, mientras que las Gemínidas de diciembre se desplazan a 35 kilómetros por segundo.
Para poder ver este fenómeno astronómico, Pérez Verde recomienda observar al cielo sin ningún tipo de artilugio o telescopio. «Lo mejor es a simple vista, porque lo que interesa es cubrir la mayor parte de cielo posible», aconseja. Así, se recomienda buscar un lugar abierto y oscuro alejado de la iluminación de las ciudades, mirar al cielo y esperar.