El 2025 quedará inscripto en los anales provinciales como el año en que San Juan materializó una de las políticas de Estado más esperadas y transversales: el Boleto Escolar y Docente Gratuito. Concebida como una de las promesas de campaña del gobernador Marcelo Orrego, esta medida busca facilitar el acceso a la educación y representa un alivio significativo en el gasto familiar destinado al transporte. Lo que inició como un compromiso, se consolidó en la práctica con una implementación escalonada, cifras de uso contundentes y una extensión progresiva que alcanzó incluso a los departamentos más alejados de la provincia.

Cronología de una implementación trascendental

El gobernador Marcelo Orrego incluyó el boleto educativo gratuito entre los compromisos fundamentales de su gestión, enfatizándolo como una política prioritaria para el ciclo 2025 durante la apertura de sesiones ordinarias. La puesta en marcha operativa comenzó el 14 de abril de 2025, fecha en la que el Ministerio de Gobierno y las empresas operadoras del sistema de transporte concertaron los mecanismos de acreditación y utilización para estudiantes y docentes.

La cobertura del beneficio se amplió paulatinamente a partir del segundo semestre del año. Fue entonces cuando se oficializó la extensión a departamentos de media y larga distancia, que hasta ese momento no estaban plenamente integrados al sistema SUBE. Esta etapa de universalización entró en vigencia a partir de septiembre de 2025.

El programa abarca a todos los niveles educativos, desde el inicial hasta el superior, incluyendo también al personal docente en actividad. Se instrumentó mediante la Credencial Única Escolar y Docente, un documento que permitió acreditar la condición de beneficiario y acceder al boleto diferenciado tanto en la RedTulum como en los servicios de transporte asociados.

Impacto y cifras que consolidan la política

Los registros oficiales, meticulosamente compilados por la Secretaría de Tránsito y Transporte, revelaron desde los primeros meses un uso intensivo y sostenido del beneficio. Las estadísticas demuestran:
• Entre 2 y 3 millones de viajes mensuales
• Con picos diarios que superaron los 100.000 pasajes
• Lo que se traduce en una erogación provincial cercana a los $500 millones mensuales, cifra que, en algunos períodos, se vio incrementada debido a la evolución tarifaria y a la demanda registrada

Estos números no solo validan la necesidad y el alcance de la medida, sino que también consolidan al Boleto Escolar y Docente Gratuito como una de las políticas de transporte más significativas implementadas en San Juan durante la última década.

Beneficios sociales y la mirada a 2026: hacia un sistema más eficiente

Más allá del notorio alivio económico que implica para miles de familias sanjuaninas y para el personal docente, el beneficio persigue un objetivo social profundo: reducir las barreras de acceso a la escolaridad. Este impacto es particularmente relevante en zonas periurbanas y rurales, donde las distancias y los costos de transporte suelen ser un impedimento. Asimismo, la medida refuerza el cumplimiento de promesas asumidas por el Ejecutivo provincial y se alinea con una visión de movilidad más equitativa e inclusiva.

Las autoridades ministeriales explicaron que la puesta en marcha de este boleto demandó un considerable trabajo interministerial, una estrecha coordinación con las empresas de transporte y diversas adecuaciones técnicas para integrar a usuarios que dependían de servicios no vinculados al sistema SUBE. La extensión a los departamentos alejados fue destacada como la fase que convirtió este beneficio en verdaderamente universal y federal en todo el territorio sanjuanino.

Claves a futuro: un sistema más controlado y eficiente en 2026

El plan proyectado por el Ministerio de Gobierno incorpora para el año 2026 una transformación estructural: el Boleto Escolar y Docente Gratuito pasará a operar directamente en la tarjeta SUBE, optimizando su funcionalidad.

Esta evolución implicará que:
• Cada estudiante deberá poseer una tarjeta SUBE debidamente registrada a su nombre.
• El beneficio se acreditará de forma individualizada y personalizada.

Este salto tecnológico permitirá:
• Prevenir de manera más eficaz el uso indebido del beneficio.
• Fortalecer sustancialmente los mecanismos de control por parte del Estado.
• Garantizar que el subsidio llegue de forma efectiva y exclusiva a quienes corresponde.
• En consecuencia, optimizar los recursos públicos destinados al transporte educativo, cuidando así el erario de todos los sanjuaninos.