Estarán incluidos la leche, cortes de carne, arroz, pastas secas, galletitas y agua mineral, entre otros. Lo acordó el Gobierno con las empresas. También habrá rebajas de 15 a 40% a todo el padrón de la ANSES.
El Gobierno está ultimando los detalles para anunciar un plan para reactivar el consumo y menguar los efectos de la inflación por estos días. En el mismo, participan desde Anses hasta la secretaría de Energía (que depende de Hacienda), pasando por el ministerio de Producción. Aunque en las empresas dicen que el anuncio podría ser este martes, desde el Gobierno dejaron trascender que será la semana que viene, con el presidente Mauricio Macri como vocero de las mismas.
El plan incluye un acuerdo que ya firmó el gobierno con las empresas productoras para congelar por seis meses los precios de 40 alimentos de la canasta básica. Entre ellos habrá varios cortes de carne, la leche, algunas clases de galletitas y pastas secas, arroz, agua mineral y otros productos de consumo cotidiano de los argentinos. El Gobierno busca incluir a los supermercados en el acuerdo para que los productos se distribuyan lo máximo posible.
No es la única medida que se está preparando. Préstamos de ANSeS, descuentos a los más de 15 millones de beneficiarios de la seguridad social en supermercados, farmacias y corralones forman parte de la batería que anunciará el Gobierno. También habrá líneas de crédito productivo, financiamiento para bienes durables y se estudia una ampliación de «precios cuidados«, aunque eso quedaría para mayo.
Los supermercados vienen ofreciendo descuentos a los jubilados desde hace rato. Pero ahora extenderán ese beneficio y también podrán aprovecharlo todos los beneficiarios del padrón de ANSeS, que son más de 15 millones de personas. De esa forma, se lograría que sectores de bajos ingresos, más proclives a los canales tradicionales (almacenes y autoservicios) se inclinen por el canal «moderno», que es como se autodenominan los supermercados.
ANSeS también ofrecerá créditos a sus 15 millones de beneficiarios. Pero la idea del organismo es que ese dinero quede dentro de la actividad comercial, y que permita inclusión financiera de sectores que no están bancarizados. Apuntan a que los montos que presten sean usados dentro de supermercados y corralones. En este último apartado, se lo piensa como un complemento del programa «Hogar», de la secretaría de Vivienda, para mejoras y refacciones de casas.
Las cadenas de supermercados aceptaron participar de la iniciativa estatal. Otorgarán entre un 10% y 15% de los descuentos a aquellos consumidores que puedan acreditar que cobran de ANSeS. Más allá de los jubilados, se les pondrá un disposición un «software» especial que los súper podrán constatar si el consumidor cobra de la seguridad social estatal o no.
Cada cadena decidirá si aplica el descuento a todos sus productos, o solo a los de almacén. Es improbable que ese beneficio se pueda combinar con «precios cuidados», otro programa en el que podría haber cambios a partir de mayo.
El descuento para el padrón de ANSeS se aplicará entre lunes y miércoles. Casi todas las grandes cadenas ya confirmaron su participación. También habrá farmacias que se sumarán, con rebajas del 40% en productos de primera necesidad de fabricación nacional.
Los créditos de ANSeS ya no llevarán el nombre de Argenta. Todo el programa se presentará como «beneficios ANSeS». El monto máximo de esos préstamos es de $ 200.000 por cabeza. De todas formas, se buscará que la cuota represente hasta un 30% del ingreso de ese beneficiario. En el caso antes mencionado, se trata de un jubilado que cobra $ 24.000 (puede incluir jubilación y pensión).
La secretaría de Energía también está ultimando detalles de unas etiquetas para electrodomésticos que fomenten la eficiencia energética. Las cadenas de supermercados (y probablemente las de electro) ofrecerán una financiación especial para que los clientes accedan a esa categoría, que comprende heladeras, lavarropas y otros productos.
Por el lado del ministerio de Producción, también podría haber líneas de crédito a tasa preferencial para empresas. La secretaría de Comercio no es simpatizante de los «precios cuidados», pero tampoco pasó inadvertido el episodio de faltantes en «La Armonía», la etiqueta de La Serenísima. Ese sachet, de importe muy conveniente, empezó a escasear. Y hubo protestas.
En los súper cuentan que los proveedores afrontan caídas de ventas. Y que «precios cuidados» les ofrecen volúmenes atractivos, aunque con márgenes menores. «Los clientes prueban mucho dentro de ‘precios cuidados’. Cuando se trata de un buen producto, vuelven», cuenta un supermercadista. En ese sentido, la próxima renovación del programa es en mayo y puede haber incorporaciones para el próximo cuatrimestre.
Asociaciones de consumidores aseguran que el monitoreo de «precios cuidados» ya no se hace y que los supermercados no poseen las etiquetas prometidas. En las cadenas replican que cuentan con actualizaciones diarias sobre el estado de la canasta y su disponibilidad en sucursales.
Fuente: Clarín