En el marco de las actividades previstas por el Día del Bastón Blanco, conmemorado el 15 de octubre, la escuela de educación especial Luis Braille, dependiente de la Dirección de Educación Especial del Ministerio de Educación, montó estaciones en Plaza Seca del Centro Cívico para que el público, con sus ojos tapados, pudiera experimentar con el tacto o el olfato, como también emular acciones del día a día que realizan las personas ciegas.

La actividad, impulsada por la ministra de Educación, Silvia Fuentes, se realizó para concientizar y sensibilizar a la sociedad acerca de los obstáculos que las personas no videntes enfrentan a diario, a la vez que representó un aporte a la integración e inclusión.

La iniciativa constó de cuatro estaciones, en las que el público, siempre con los ojos cubiertos por antifaces, pudo probar diferentes tipos de comida para tratar de determinar qué estaban consumiendo (mermeladas, conservas o frutos secos); lo mismo sucedió con el banco de aromas, con frasquitos en los que había hierbas o frutas; o la del tacto, con varios objetos sobre la mesa.

Otra actividad consistió en experimentar cómo servirse agua o té (por cuestiones de seguridad no se utilizó líquidos calientes), tal como lo hacen los no vidente y usando ciertas técnicas, como el uso del dedo índice. Cada tutorial estuvo a cargo del cuerpo docente de la escuela Braille, que a la vez brindó información y pautas para ayudar a las personas ciegas en la vía pública.

“Se trata de concientizar y sensibilizar. Lo que buscamos en estas estaciones fue que el público pudiera ponerse en lugar de una persona ciega o con discapacidad visual, vivenciar parte de su día a día. A la vez, le comunicamos a la sociedad los servicios que brindamos en la institución, desde atención de la primera infancia hasta talleres para jóvenes y adultos”, indicó Marisa Pelletán, directora de la escuela Luis Braille, institución que está ubicada en Abraham Tapia y Circunvalación, Capital.