Hubo una reunión en Buenos Aires donde se conocieron los detalles. Según el ministro Díaz Cano, la economía argentina tendrá que tomar un nuevo rumbo para que el histórico convenio no termine afectando a las economías regionales como San Juan.

Luego de semanas de versiones a grandes rasgos, la Nación convocó a representantes de todas las provincias para discutir los detalles del Acuerdo de Libre Comercio entre el Mercosur y la Unión Europea. El Ministro de Producción de San Juan, Andrés Díaz Cano, estuvo en el encuentro con el ministro de Producción y Trabajo de la Nación, Dante Sica, el canciller Jorge Faurie y la secretaria de Comercio Exterior, Marisa Bircher. Ya en San Juan, el funcionario aseguró que el convenio es bueno, siempre y cuando se den ciertas condiciones que le permitan a los productores sanjuaninos ser competitivos. 

Para Díaz Cano, el acuerdo, que se viene gestionando desde hace 20 años, requerirá cambios profundos en la economía nacional para que lo que se exporte desde el país pueda ingresar a los mercados europeos y competir con lo que se produce allí. Para eso, puso el foco en que se controle la inflación, que las tasas de interés para pedir crédito bajen a un dígito (en la actualidad son récord y llegan hasta el 70%), que los costos de logística disminuyan, que el Estado nacional refuerce la red ferroviaria y que no haya subas de tarifas, entre otros. 

Para poder hacer un análisis detallados de qué cambios se deben hacer antes de la implementación del tratado, Diaz Cano solicitó información detallada de cuáles son las condiciones europeas de cada sector productivo. De esta manera quieren hacer un diagnóstico para determinar cómo podría afectar el acuerdo a cada economía regional y ver cuáles serían las ventajas y las desventajas para cada continente.

En el caso de San Juan 

En la provincia los dos sectores que podrán verse más beneficiados son el de la uva de mesa y las pasas, ya que son los que están en condiciones en la actualidad de exportar a los mercados. Pero para llegar al libre comercio prometido habrá que esperar entre 2 a 15 años. Es que el proceso de aplicación será lento, ya que calculan que recién entre 2021 y 2022 los congresos de cada país intervinientes aprobarán el marco legal del acuerdo. Luego de eso empezarán el trabajo de implementación, que puede demorar hasta 15 años más. 

En cuanto a las circunstancias actuales de la provincia, para Díaz Cano los productores cuentan con una gran ventaja: la calidad de lo que se produce está a la altura de lo que exigen los compradores europeos. Lo que necesitarán son condiciones macroeconómicas y coyunturales que les permitan competir de igual a igual. La tecnología local estaría casi a punto para pararse frente a lo que se usa del otro lado del Atlántico.

Por el momento las condiciones no se dan, ya que la inflación en Europa es de un dígito, las tasas de interés para invertir del 2% y las tarifas estables. Eso sin contar con que impuestos como retenciones ni siquiera existen y que los Estados nacionales subsidian a buena parte de sus productores. Para Díaz Cano, la gestión provincial ha amortiguado parte del impacto económico nacional a los productores locales, subsidiando tasas, con inversión y otros, pero sin el esfuerzo de Nación, no se pueden acoplar las economías. 

FUENTE: https://www.tiempodesanjuan.com/economia/2019/7/12/acuerdo-del-mercosur-ue-provincia-le-dio-pulgar-arriba-pero-con-reparos-260302.html